La siguiente crítica, del disco Onion Soup Triturated by Big Toxic, del grupo mallorquín Sexy Sadie y el disc-jockey y productor Big Toxic (Subterfuge Records, 1997), salió en el suplemento "Táboa Redonda" el 2 de mayo de 1998. La presento aquí en su redacción y con su título original, no como salió en su día (me da un poco de vergüenza por lo bisoño y hortera que era entonces, pero bueno), más algún retoque de nuevo cuño. Que les aproveche.
Sexy Sadie, el mejor grupo de rock de la escena independiente española del momento, se alía con uno de nuestros mejores músicos eletrónicos (Big Toxic, habitual productor de Fangoria, entre otros) para presentar un disco fresco, fuerte, potente y cargado de influencias, muchas veces inclasificables.
Las remezclas del segundo disco de Sexy Sadie, Onion soup, constituyen el segundo caso en España (del que yo tenga conocimiento, después del de Esclarecidos) de algo que en países anglosajones está a la orden del día, que es editar un elepé de nuevas mezclas del disco original, a cargo de pinchadiscos o artistas de música electrónica reputados. O sea, que sacan dos discos al precio de uno (para ellos, claro, no para el comprador).
Y el resultado es, en este caso, más que notable. La mezcla de rock potente con música tecno que nos presenta el álbum está muy bien empastada, si bien yo, personalmente, esperaba algo más machacón y bailable. De todos modos, creo que es uno de los mejores discos del año pasado.
Y bien, sólo me queda por decir que la escena rockera underground española, o indie, o alternativa, o como quieran llamarle, es decir, los grupos que cantan en inglés, con calidad y con potencial de cara al exterior se reduce, en mi opinión, a dos grupos: Sex Museum, ya creciditos y curtidos, y Sexy Sadie, el mejor grupo de la nueva hornada, tras el batacazo de El Inquilino Comunista con lo que han hecho después de un más que aceptable primer disco. De Dover y demás engendros, prefiero no hablar.
Una sopa bien batidita
Big Toxic pasa por la 'baticao' el segundo elepé de Sexy Sadie
Sexy Sadie, el mejor grupo de rock de la escena independiente española del momento, se alía con uno de nuestros mejores músicos eletrónicos (Big Toxic, habitual productor de Fangoria, entre otros) para presentar un disco fresco, fuerte, potente y cargado de influencias, muchas veces inclasificables.
Las remezclas del segundo disco de Sexy Sadie, Onion soup, constituyen el segundo caso en España (del que yo tenga conocimiento, después del de Esclarecidos) de algo que en países anglosajones está a la orden del día, que es editar un elepé de nuevas mezclas del disco original, a cargo de pinchadiscos o artistas de música electrónica reputados. O sea, que sacan dos discos al precio de uno (para ellos, claro, no para el comprador).
Y el resultado es, en este caso, más que notable. La mezcla de rock potente con música tecno que nos presenta el álbum está muy bien empastada, si bien yo, personalmente, esperaba algo más machacón y bailable. De todos modos, creo que es uno de los mejores discos del año pasado.
Y bien, sólo me queda por decir que la escena rockera underground española, o indie, o alternativa, o como quieran llamarle, es decir, los grupos que cantan en inglés, con calidad y con potencial de cara al exterior se reduce, en mi opinión, a dos grupos: Sex Museum, ya creciditos y curtidos, y Sexy Sadie, el mejor grupo de la nueva hornada, tras el batacazo de El Inquilino Comunista con lo que han hecho después de un más que aceptable primer disco. De Dover y demás engendros, prefiero no hablar.
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