martes, 18 de septiembre de 2012

Mini-crítica de "El lugar sin límites"

El lugar sin límites (Arturo Ripstein, 1978) destaca por la excelente actuación de Roberto Cobo (que lleva en sus hombros todo el peso de la película), el Jaibo de Los olvidados (Luis Buñuel, 1950). En realidad todo en esta cinta remite a Buñuel: Ripstein fue amigo y asistente suyo, la novela de José Donoso en la que está basada le encantaba al aragonés y en ella hace uno de los últimos papeles de su vida otro de los actores fetiche del de Calanda: Fernando Soler.

Aunque la novela está escrita por un chileno y no se dice dónde está el lugar de El Olivo, la implantación en México que hace de este villorrio Ripstein resulta muy adecuada, con el machismo tan propio de este pueblo y su tendencia al caciquismo, lo que también me recuerda a otra novela muy querida por Buñuel: Pedro Páramo, de Juan Rulfo. No he leído la novela de Donoso (espero hacerlo en breve), así que desconozco sus intenciones, pero la tesis de Ripstein es que debajo del machismo tan propio del mexicano se esconde el miedo a tener inclinaciones homosexuales.


C. Aguilar (2009) ha calificado esta cinta de "film sórdido y consistente, que denuncia el caciquismo y la miseria del México rural. Una de las mejores películas del director".

Ficha en IMDb: http://www.imdb.com/title/tt0076336/
Ficha en filmaffinity: http://www.filmaffinity.com/es/film807959.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario